El nitrato y los trihalometanos (THM) en el agua potable son comunes y potencialmente cancerígenos para los humanos. Un estudio examinó la relación entre la contaminación por nitratos en el agua potable y los THM y su impacto en el cáncer de próstata.
El cáncer de próstata es el cáncer más común en los hombres en Alemania. En 2017 se diagnosticaron 62.230 nuevos casos en Alemania
La ingesta humana de nitrato se produce principalmente a través de los alimentos y el agua potable. El nitrato ingerido se reduce a nitrito y es probable que sea cancerígeno para los humanos en condiciones que conducen a la nitrosación endógena. Hay estudios epidemiológicos limitados destinados a descubrir la relación entre la exposición a los nitratos del agua potable y el cáncer, y hasta ahora solo se ha encontrado evidencia consistente para el cáncer colorrectal.
El nitrato y el cloro en el agua potable son cancerígenos
Los desinfectantes que se agregan al agua sin tratar para inactivar los patógenos microbianos conducen a la formación de varios subproductos de la desinfección (DBP). Los DBP son una mezcla compleja de productos químicos formados como subproductos de las reacciones de los desinfectantes aplicados al agua potable. El cloro es el desinfectante más utilizado en el mundo, y los trihalometanos (THM) y el ácido haloacético son los DBP formados en las concentraciones más altas después de la cloración. La cloración del agua que contiene amoníaco produce cloraminas, que a su vez conducen a la formación de subproductos nitrogenados como las cancerígenas N-nitrosaminas. Varios DBP son genotóxicos in vitro y cancerígenos en estudios con animales, y la IARC ha clasificado algunos DBP como posibles carcinógenos humanos.